Han pasado ya tres días del incidente que
protagonizaron Hamilton y Rosberg en el trazado belga de Spa-Francorchamps,
pero en lugar de intentar que las aguas bajen algo más tranquilas en la
escudería alemana, parece que los protagonistas prefieren que las aguas bajen
cada vez mas revueltas.
Si ayer fue Nico Rosberg, quien mediante
un vídeo, aseguro que las cosas no eran tal y como las había explicado
Hamilton, que todo fue un lance de carrera, que su versión de los hechos es
"muy diferente" y además, calificar las palabras de su compañero de
faltas de amabilidad, hoy ha sido el piloto inglés, quien ha echado leña al
fuego.
Lewis sigue acusando a Nico, hasta tal
punto que niega el hecho de que alguna vez hayan sido amigos verdaderos,
asegurando, para la publicación austríaca "Sportwoche", que no
recuerda el momento en el que conoció a su actual compañero de escudería,
"No es algo que recuerdes. Sí, es exagerado hablar de amistad. Siempre se
ha dicho que somos amigos, bla, bla, bla. No estamos aquí para jugar. Pero desde
Mónaco este año, Nico me dejó claro que hará lo que sea para ganarme. Sea cual
sea el caso, siempre pondré al equipo primero y no me tomaré nada por mi propia
mano"
Eso sí, el inglés ha asegurado que jugará
limpio a la hora de intentar recuperar la distancia en la clasificación.
"El fin de semana fue dañino. No sé cómo voy a recuperar esos 29 puntos,
pero tengo un gran grupo de personas detrás de mí. Los chicos de la parte de mi
garaje han tenido bastantes carreras malas, pero sé que con su apoyo y con el de
los aficionados, sumado al hecho de tener un gran coche, un gran equipo, espero
que podamos tener buenos resultado ahora.
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