La F1 se desplaza al país donde la vio nacer, hace ya 72 años, en el siempre emocionante circuito de Silverstone
Este fin de semana la Fórmula 1 vuelve a casa. Ir a Gran
Bretaña y especialmente al circuito de Silverstone, es posiblemente un retorno
a su lugar de nacimiento.
Hablar de Silverstone es hablar de la historia viva de la
Fórmula 1. Y es hablar del circuito en el que se corrió la primera carrera de
la máxima categoría automovilística. El 13 de Mayo de 1950, Giuseppe Farina con
su Alfa Romeo ganaba en Silverstone el primer Gran Premio de un Mundial de
Fórmula 1, ante cien mil espectadores y otros veinte monoplazas. Este año celebraremos
la 53ª edición
Silverstone es un circuito rápido, aunque a medida que ha
ido cambiando a lo largo de los años, ha ido perdiendo ese carácter tan rápido
que solía tener. Si a mediados de los años 80, era prácticamente tan rápido
como Monza, a finales de esa década se ralentizó el circuito, y aún un poco más
a principios de los años 90, que dejaron Silverstone tal y como lo conocíamos
hasta hace pocos años, antes de la última modificación, aunque el carácter
general no se ha visto demasiado afectado.
Para iniciar esta nueva época, en 2010 el circuito estreno
una nueva configuración destinada a mejorar el disfrute de los espectadores y
hacer de Silverstone un reto aún mayor para los pilotos. Y es que el nuevo
complejo de curvas denominado "Arena", que comienza en la remodelada
Abbey (curva 1) para volver al antiguo trazado en Brooklands (curva 6), hace
que al contrario de lo que suele suceder, el circuito sea más rápido aún que
antes.
En 2011 se completa el proyecto de renovación del circuito
con el cambio de la posición de la recta de meta, ahora entre la curva Club
(18) y Abbey (1), inaugurándose un nuevo paddock y edificio de boxes.
Con una gran cantidad de curvas rápidas que exigen una
elevada carga aerodinámica, el circuito pone los pelos de punta, sobre todo
cuando los pilotos se lanzan en séptima velocidad a la curva 9, Copse, para
llegar a 300km/h a Becketts, una secuencia de curvas muy fluida en la que los
pilotos prácticamente no tocan los frenos y en la que la alta velocidad genera
un apoyo en el coche que hace que los pilotos sufran tremendas fuerzas G.
Otro factor a tener en cuenta en Silverstone son las
condiciones climatológicas. En este circuito el viento suele ser muy fuerte, y
además hay que tener en cuenta que la lluvia puede hacer presencia en el
trazado en cualquier momento, dado que se encuentra en una zona muy propensa a
las precipitaciones.
Los equipos suelen quitar ala al llegar a Silverstone para
poder afrontar en mejores condiciones la rapidez del circuito. Además es
importante contar con un motor potente.
El circuito de requiere una alta carga aerodinámica. El
máximo rendimiento se consigue con un buen equilibrio entre la parte delantera
(tiene que ser dura) y la trasera (tiene que ser más blanda), dado que se
necesita buen apoyo en la parte delantera para afrontar las curvas rápidas del
circuito, y un buen agarre en la parte trasera para negociar las curvas lentas
de la última parte del trazado.
Los neumáticos sufren mucho debido a las curvas muy rápidas
que hay aquí. Como ya comentamos, los frenos no sufren mucho porque en la
primera parte del trazado apenas se utilizan.
El coche tiene que tener mucha altura para que el piloto vea
bien en las zonas de baches. En cuanto a las paradas, las altas posibilidades
de lluvia hacen que las estrategias puedan cambiar.
El circuito tiene una longitud de 5.891 metros con 18
curvas, la carrera está concertada a 52 vueltas con lo que su distancia total
será de 306,198 kilómetros.
Para esta cita tendremos 3 zonas de DRS en lugar de las dos
habituales. El punto de detección de la primera zona estará antes de la curva
3, la Village, y el punto de activación después de Aintree, (curva 5), para
utilizarlo en la recta Wellington. La segunda zona de detección estará después
de la Maggots, mientras que su correspondiente activación es, el tras el viraje
de Chapel, curva 14.
Pero además desde 2018 tenemos una zona extra, desde la
última curva hasta la primera. Se activara tras la Curva 18, Club, de tal
manera que podrían entrar a la primera curva, Abbey, y a la segunda, Farm, con
él DRS abierto.
Junto con Suzuka en Japón y Spa en Bélgica, Silverstone
exige la mayor cantidad de energía a los neumáticos durante todo el año. Por
eso se han nominado los neumáticos más duros de la gama. El C1 como P Zero
Blanco Duro, C2 como P Zero Amarillo Medio, y C3 como el P Zero Rojo Blando
Esta es la tercera vez que esta combinación ha sido nominada este 2022.
Las curvas ultrarrápidas y de alta energía, como el complejo
Maggotts y Becketts, no son el único desafío que Silverstone tiene para
ofrecer. El clima puede ser extremadamente variable, desde un sol brillante
hasta lluvia intensa.
La carrera del año pasado se ganó con dos cambios de
neumáticos. Uno de ellos tuvo lugar bajo un período temprano de bandera roja
tras la colisión entre Lewis Hamilton y Max Verstappen. Casi todos los pilotos
completaron dos tandas en la media más una última en la dura. Este año, los
compuestos y las estructuras son completamente diferentes, y tampoco hay
calificación de sprint, que fue un factor en la estrategia del año pasado
Como fue el caso el año pasado, hay una asignación estándar
para cada automóvil en 2022: dos juegos de duros, tres juegos de medios y ocho
juegos de blandos.
El número de sets permitidos por fin de semana es el mismo
que el del año pasado, 13.
Recordemos que de cara a este 2022, desaparece la obligación
de que los pilotos que se hayan clasificado entre los 10 primeros, comenzar la
carrera con el neumático que habían logrado el mejor tiempo en la Q2.
Como anécdota, señalar que el circuito de Silverstone se
encuentra en el Motorsport Valley, zona en la que se ubican las sedes de la
mayoría de equipos de F1.
Así serán los especiales horarios de este fin de semana
Viernes
Libres 1: 14:00h
Libres 2: 17:00h
Sábado
Libres 3: 13:00h
Clasificación: 16:00
Domingo
Carrera: 16:00h