viernes, 8 de febrero de 2013

Debut "calentito" de 'Nippon Ichi'

En la jornada de hoy,la ultima de los primeros test de pretemporada,el catalán Pedro de la Rosa se convertía en el quinto piloto español en pilotar un Ferrari de Fórmula 1.

Pero la alegria de su debut duro poco,ya que en su segunda vuelta por el Circuito de Jerez a sufrido un problema en la caja de cambios del F138 y la consiguiente fuga de aceite ha provocado un pequeño incendio que se ha propagado a través del escape derecho y, en el mismo lado, también por la toma de refrigeración que los de Maranello han instalado justo al lado del cockpit.
Eran las 10:04 cuando Pedro dejaba el box rojo, pero su disfrute ha durado apenas unas curvas. Poco después de la curva Dry Sack, ha tenido que detenerse y bajar rápidamente de su montura para indicar a los comisarios dónde aplicar los extintores con la mayor celeridad. Un monovolumen ha devuelto a Pedro al box, adonde ha charlado brevemente con Andrea Stella y Pat Fry. Pocos minutos después, el camión grúa ha llevado el coche averiado hasta la puerta de los talleres de Ferrari.
Los mecánicos de Ferrari se pusieron a trabajar para arreglar el monoplaza rápidamente y De la Rosa pudo regresar a pista al filo de las 14:00 horas para seguir con la puesta a punto del nuevo F138.
Una vez sustituida la transmisión, Pedro ha tenido tres horas y media de trabajo intenso en pista, que se ha traducido en 51 vueltas al trazado jerezano, un montón de pruebas aerodinámicas y algunas tandas interesantes con goma media y seis vueltas lanzadas. Un balance rico, pero insuficiente para un De la Rosa tan serio y metódico que a buen seguro había planificado cada minuto de trabajo en el coche.
Así se expresaba el veterano piloto de Cardedeu en su encuentro con la prensa, pocos minutos después de bajarse del coche: "Lo importante es que las sensaciones han sido buenas. El día ha empezado difícil con el problema en la caja de cambios, pero por la tarde al menos hemos podido completar el programa de test aerodinámicos, lo cual es positivo, y para mí ha sido un día de aprendizaje. Me lo he tomado con calma, he ido aprendiendo, y todo va a ser útil para todo el trabajo de simulador, que es el objetivo. No hay que buscarle nada más".
La sensación de no haber aprovechado el día al máximo ha perseguido a Pedro en cada frase: "Me hubiese gustado hacer más kilómetros, me hubiese gustado poder aprovechar la mañana. Cuando tienes un día te quedas con el sabor de que podrías haber exprimido más el coche. Pero tampoco pasa nada, no se pueden hacer milagros", ha dicho con cierta resignación.
Pedro ha sido muy claro respecto a la competitividad del coche: "Yo no puedo decir nada del coche porque no tengo nada con lo que comparar. Realmente, en lo que yo puedo comparar este coche con el del año pasado… está a años luz", ha explicado.
"El objetivo de este día de test era conocer el equipo, el coche y acelerar todo el programa de simulación que tenemos pendiente en Maranello. No había más, o sea que no tengo ninguna varita mágica ni voy a poder decirle a Fernando cómo va el coche porque no tengo punto de referencia para compararlo".
"El coche me ha parecido bien equilibrado, que respondía muy bien a los cambios. Y a partir de aquí no tiene ningún problema, hay que ir más rápido y ya está, hay que ir progresando cada día, como todos los equipos van a hacer de aquí a Australia".
Sobre dónde está Ferrari respecto a los demás: "Es imposible sacar ninguna conclusión, porque ya no sólo es una cuestión de carga de combustible, hay un tema también de neumáticos, porque los saltos entre los neumáticos son gigantes a nivel de grip".
"Hay que analizar los tiempos tranquilamente y ver un poco dónde podemos estar y dónde están los demás. Pero realmente creo que hasta las últimas pruebas en Barcelona es absurdo hablar de nada más".
"Estoy muy a gusto en el equipo, me han recibido con los brazos abiertos, tienen mucho tiempo para mí y estoy terriblemente feliz en este equipo. Pero soy consciente de lo mucho que tengo que aprender también y lo mucho, el tantísimo trabajo que hay de aquí a Australia".
"El desgaste físico que requiere llevar un coche con este tipo de adherencia es muy diferente al que yo tenía el año pasado, es lo que primero te choca. Tienes que aguantar fuerzas G mucho mayores en las curvas y requiere un poco de tiempo mental habituarte otra vez. Por eso he ido de menos a más y he terminado bastante satisfecho de cómo estaba conduciendo al final, pero repito, me ha faltado otro día para sacar más conclusiones".
"Para mí pensad que es una curva de aprendizaje brutal, en pocos días cambiar a un equipo como éste, coche, simulador, gente… para mí todo requiere un poco más de tiempo. Estoy digiriéndolo todo lo bien que puedo, pero todavía soy consciente de que puedo rendir mucho mejor".
"Estos coches son de una generación completamente diferente. Ésta es la generación de coches con escapes y mapas de motor mucho más desarrollados que en mi etapa fuerte en McLaren. Por tanto, es una nueva generación de coches y son incomparables. Pero al final lo que te sorprende de equipos tan fuertes como McLaren y Ferrari es lo mucho que hacen para ganar milésimas, lo que cuesta sacar milésimas de un coche de F1 llevado a la perfección, al grado de perfección que tiene. Esto es lo más ilusionante. En esto es igual que McLaren. Pero luego hay infinidad de diferencias que prefiero guardármelas para mí y, además, también estoy aprendiendo mucho sobre el equipo".
P.D.: Por si alguien no lo sabe, 'Nippon Ichi' es el apodo que le dieron los japoneses a Pedro de la Rosa, y significa 'el número 1 en Japón'

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