lunes, 23 de septiembre de 2013

La seguridad ante todo¡¡

Ayer, y como todos recordareis a falta de tan solo unas pocas vueltas para finalizar el GP de Singapur, Mark Webber empezó a sufrir problemas de motor, lo que le obligo a abandonar ya en la última vuelta teniendo que ceder dos posiciones a los pilotos de Mercedes y finalmente, viéndose obligado a abandonar la carrera permitiendo al resto de sus rivales recuperar una posición.
Una vez finalizado el GP,y al pasar Fernando Alonso por la zona en donde se encontraba el australiano, detuvo el coche y Webber se monto en el "remontándolo" en el F138 y llevándolo hasta el pit lane.
El hecho parecía que iba a tener mayores consecuencias, aparte de la lógica sonrisa del público y de las imágenes vistas por la TV en donde se veía a Alonso haciendo de taxista.
Poco después de ocurrir esto, supimos que ambos pilotos habían sido llamados por dirección de carrera para aclarar lo sucedido, lo que rápidamente supuso en las redes sociales un montón de comentarios y especulaciones sobre alguna posible sanción a los dos pilotos. Personalmente yo pensaba que la acción no conllevaría mayores consecuencias y todo acabaría en una sanción económica.
Pero no, me equivoque por completo. Los dos pilotos recibieron una reprimenda por parte de los comisarios del GP de Singapur al entender quela maniobra había sido muy peligrosa
En el caso de Webber, tal advertencia era tercera de la temporada y la 'amonestación' se convierte en la penalización de diez posiciones en la parrilla del próximo GP de Corea. Así, el australiano deberá retroceder diez plazas tras la sesión de calificación en Yeongam en cumplimiento de la sanción. Por su parte, es la primera reprimenda para Alonso y se libra de 'castigo'.
Los comisarios del Gran Premio de Singapur han considerado que Webber ha incumplido el Artículo 30.9 (b) del Reglamento Deportivo. De este modo, señalan: "Ha entrado en la pista sin el permiso de los comisarios entre el inicio de la vuelta de honor y el momento en que el último monoplaza llegaba al parque cerrado".
Respecto a la reprimenda a Alonso, los comisarios entendieron tal 'castigo' por pensar que el español ha ido más rápido de lo necesario cuando Webber también iba en el F138: "Ha pilotado el monoplaza de una forma que podía ser considerada potencialmente peligrosa para los tros pilotos o cualquier otra persona. En este caso, dos monoplazas han tenido que tomar una acción evasiva como resultado".
Mark Webber comento que se quedó "frustrado" después de recibir su tercera reprimenda de la temporada:"No hay mucho que pueda decir sobre eso. Es muy frustrante, pero os comisarios tomaron su decisión. No comprometerá mi carrera en Corea, ya que será complicada", señaló Webber.
Sin embargo, el australiano no fue el único miembro de Red Bull en mostrar su insatisfacción, ya que el jefe del equipo, Christian Horner, cuestionó el "sentido" de la penalización: "Los pilotos han hecho lo mismo en otros años, ya pasó justo al contrario en Alemania 2011. Una de las imágenes más icónicas que puedo recordar es la de Nigel Mansell llevando a Ayrton Senna a boxes [Gran Premio de Gran Bretaña de 1991]. En esta ocasión, fue bueno para el espectáculo y para la televisión, y hubiera sido suficiente con una multa".
"Lo que resulta una lástima es que terminara siendo una reprimenda y, por el hecho de ser la tercera, se transformara en una sanción de diez posiciones. Por desgracia, las reprimendas parecen ser lo único válido para los comisarios, y quizás en este caso hubiera sido suficiente con hablarlo con los pilotos. De hecho, una multa hubiera sido mejor, pero no creo que es algo que esté disponible para los comisarios ahora [los equipos son los únicos que ahora puden recibir multas, no los pilotos].
Al conocer la sanción, yo también mostré mi desacuerdo con esta, y me pareció del todo exagerada. Pero hoy tengo que rectificar y después de ver más tranquilamente la secuencia de las imágenes, tengo que reconocer que la sanción es del todo justa y que creo que puso en peligro tanto la integridad de ellos dos, cómo la del resto de pilotos y comisarios. Sin ir más lejos, Hamilton tuvo que realizar una brusca maniobra para esquivar el monoplaza parado de Alonso
 

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