jueves, 26 de julio de 2018

Previo GP de Hungría: Así es Hungaroring


Llegamos a la decimosegunda cita del calendario y última antes del parón veraniego

Una vez hubo terminado el bloqueo político a Hungría, los húngaros quisieron ser protagonistas en el mundo del automóvil, y pensaron tener un gran premio local. Así, el 1 de Octubre de 1985 comenzó la construcción del circuito de Hungaroring, que albergaría la primera carrera de Fórmula 1 en Hungría. Se construyó a unos treinta kilómetros de la capital de Hungría, Budapest.
En 1986, llego el ansiado Gran Premio de Fórmula 1. Más de 100.000 espectadores asistieron a una de las victorias más memorables de Nelson Piquet ante Ayrton Senna, con un adelantamiento magistral en la recta de meta. El segundo momento histórico que se puede rescatar de Hungaroring llega en 2003, tras una notable actualización de la pista, cuando Fernando Alonso lograba su primera victoria en la F1. La edición de este año, es la 33ª consecutiva de este Gran Premio
Lento y revirado, para los pilotos es un circuito divertido para pilotar, pero el asfalto provoca bastante quebraderos de cabeza a pilotos y equipos por dos motivos: Uno, el polvo, debido a que la pista no se usa mucho el resto del año, haciendo que el agarre vaya mejorando según se va limpiando y se acumula la goma tras el paso de los monoplazas. El segundo, es su temperatura, ya que normalmente hace mucho calor, superando habitualmente el asfalto los 50ºC. El calor también lo hace duro físicamente para los pilotos porque la carrera suele ser muy larga, casi en el límite de las dos horas.
Al margen de la recta de 700 metros, el resto es una sucesión de curvas de media y baja velocidad, por lo que la configuración de los coches es de máxima carga aerodinámica, similar a la de Mónaco, lo que permite a los pilotos ser agresivos con el coche. El agarre mecánico es muy importante, y los reglajes de la suspensión se ablandan un poco para mejorarlo y para disponer de buena tracción a la salida de las curvas, que obligan al piloto a dosificar continuamente el acelerador. La ausencia de largas rectas, y por lo tanto también de fuertes frenadas, hace que los adelantamientos sean muy complicados. La frenada para la primera curva es la mejor oportunidad, pero el piloto de delante tiene que cometer un error saliendo de la última curva para poder cogerle el rebufo en la recta.

En el transcurso de los 4.381 metros que tiene de longitud el trazado, los pilotos tienen que frenar por debajo de 100km/h en tres puntos  y cambiar de marcha en 48 ocasiones. Los pilotos deberán dar 70 giros al trazado.
En cuanto al carril de boxes, Hungaroring cuenta con un pit lane de 341 metros, que tarda en recorrerse 15,3 segundos más la parada.
En Hungría y como es habitual, la FIA implementará también dos zonas de DRS. El primer punto de activación será en la recta de meta, uno de los lugares más claros de adelantamiento, y la segunda está entre las curvas uno y dos. Ambas zonas de DRS tendrán un solo punto de detección, localizado unos metros antes de encarar la curva 14.
Pirelli llevará a Hungría los compuestos medio, blando y ultrablando, compuestos que deberían proporcionar un buen compromiso entre rendimiento y resistencia a las altas temperaturas. Hungaroring no es particularmente exigente con los neumáticos, pero la serie ininterrumpida de curvas hace que los compuestos no tengan muchas oportunidades de refrescarse en el transcurso de la vuelta.
Horarios completos:
Jueves
  Libres 1: 11:00h
  Libres 2: 15:00h
Sábado
  Libres 3: 12:00h
  Calificación: 15:00
 Domingo
  Carrera: 15:10h

miércoles, 18 de julio de 2018

Previo GP de Alemania: Así es el circuito de Hockenheim


Tras faltar el año pasado, vuelve el histórico GP de Alemania. Y lo hace repitiendo el escenario de la cita celebrada en 2016

El caso de Alemania es uno de los precedentes de lo que ha pasado en España. Tras una época dorada con los años de gloria de Schumacher, en los que organizaban dos Grandes Premios en los que se agotaban las entradas. El descenso de público en los circuitos alemanes llevó a tomar la decisión de celebrar una sola cita al año con la alternancia de las sedes.
Pero las cosas no mejoraron, y tras no llegar a un acuerdo ni con Nurburgring ni con Hockenheim para la disputa de la carrera, la FIA dejo finalmente el GP de Alemania fuera del mundial. Por suerte la F1 vuelve a Alemania en 2016, aunque al año siguiente volvió a desaparecer.
A 25 kilómetros en dirección sudoeste de Heidelberg, en la zona superior del valle del Rin, el circuito de Hockenheimring se encuentra a escasos kilómetros de la ciudad que le da su nombre, Hockenheim.
 Trazado nacido en 1932 y al que Hermann Tilke ha sido el último en "reorganizar", o casi mejor dicho "mutilar". A costa de perder parte de sus zonas de velocidades extremas, se ha convertido en un circuito en el que abundan las luchas cuerpo a cuerpo y se suelen ver numerosos adelantamientos.
El circuito de Hockenheim se encuentra en las cercanías de Heildelberg y fue construido en la primera mitad de los años treinta. Originariamente era un circuito de pruebas para los coches de Mercedes- Benz. El trazado alemán tiene como característica principal sus largas rectas que hacen que se alcancen velocidades elevadísimas. Si bien el circuito ha sufrido algunas modificaciones para reducir su velocidad, la pista de Hockenheim continúa siendo una de las más rápidas del calendario, con puntas de más de 330 km/h.

A pesar de que ya no cuenta con las largas rectas del pasado, aún sigue siendo un circuito exigente para el motor, ya que la velocidad media de este durante la vuelta es alta, el 62% de la vuelta se completa con al acelerador pisado a fondo.
Hockenheim tiene una longitud de 4.574 metros, que los pilotos tendrán que completar hasta en 67 ocasiones el domingo para conseguir una distancia total de carrera de 306.458 km. Lo conforman 17 curvas, 10 de ellas a derechas y 7 a izquierdas.
El trazado, desde su remodelación, cuenta con dos zonas claves: el estadio, revirada y estrecha donde es casi imposible adelantar; y la parabólica (o recta de atrás), tras la que los pilotos llegan a la frenada de la horquilla de la curva 6, el punto más claro de adelantamiento de la pista.
Como novedad, este 2018, tendremos tres zonas de DRS. La primera zona se encuentra tras la primera curva (Nordkurve) y llega hasta la frenada de la segunda. La segunda zona de DRS está en la larga y ligeramente inclinada curva que conduce a los monoplazas hasta la curva 6 del circuito, una de las horquillas más lentas de la temporada que se coge, aproximadamente, a unos 65 km/h. Allí, los pilotos intentarán aprovechar la fuerte frenada para hacer efectiva su maniobra. La novedad de este año, se encuentra en la tercera zona, la cual estará en la recta principal.
Para esta carrera, Pirelli ha decidido traer los compuestos  Medios, los Blandos y el Ultrablando.
Horarios completos:
Jueves:
  Libres 1: 11:00h
  Libres 2: 15:00h
Sábado:
  Libres 3: 12:00h
  Calificación: 15:00
 Domingo
  Carrera: 15:10h

miércoles, 4 de julio de 2018

Previo GP de Gran Bretaña: Así es el trazado de Silverstone


Llega la décima cita de la temporada, y la F1 se desplaza al país donde la vio nacer, hace ya 68 años. Llega el GP de Gran Bretaña, en el siempre emocionante circuito de Silverstone

La Fórmula 1 vuelve a casa, ir a Gran Bretaña y especialmente al circuito de Silverstone, es posiblemente un retorno a su lugar de nacimiento.
Hablar de Silverstone es hablar de la historia viva de la Fórmula 1. Y es hablar del circuito en el que se corrió la primera carrera de la máxima categoría automovilística. El 13 de Mayo de 1950, Giuseppe Farina con su Alfa Romeo ganaba en Silverstone el primer Gran Premio de un Mundial de Fórmula 1, ante cien mil espectadores y otros veinte monoplazas. Este año celebraremos la 52ª edición
Silverstone es un circuito rápido, aunque a medida que ha ido cambiando a lo largo de los años, ha ido perdiendo ese carácter tan rápido que solía tener. Si a mediados de los años 80, era prácticamente tan rápido como Monza, a finales de esa década se ralentizó el circuito, y aún un poco más a principios de los años 90, que dejaron Silverstone tal y como lo conocíamos hasta hace pocos años, antes de la última modificación, aunque el carácter general no se ha visto demasiado afectado.
Para iniciar esta nueva época, en 2010 el circuito estreno una nueva configuración destinada a mejorar el disfrute de los espectadores y hacer de Silverstone un reto aún mayor para los pilotos. Y es que el nuevo complejo de curvas denominado "Arena", que comienza en la remodelada Abbey (curva 1) para volver al antiguo trazado en Brooklands (curva 6), hace que al contrario de lo que suele suceder, el circuito sea más rápido aún que antes.
En 2011 se completa el proyecto de renovación del circuito con el cambio de la posición de la recta de meta, ahora entre la curva Club (18) y Abbey (1), inaugurándose un nuevo paddock y edificio de boxes.
Con una gran cantidad de curvas rápidas que exigen una elevada carga aerodinámica, el circuito pone los pelos de punta, sobre todo cuando los pilotos se lanzan en séptima velocidad a la curva 9, Copse, para llegar a 300km/h a Becketts, una secuencia de curvas muy fluida en la que los pilotos prácticamente no tocan los frenos y en la que la alta velocidad genera un apoyo en el coche que hace que los pilotos sufran tremendas fuerzas G.

Otro factor a tener en cuenta en Silverstone son las condiciones climatológicas. En este circuito el viento suele ser muy fuerte, y además hay que tener en cuenta que la lluvia puede hacer presencia en el trazado en cualquier momento, dado que se encuentra en una zona muy propensa a las precipitaciones.
Los equipos suelen quitar ala al llegar a Silverstone para poder afrontar en mejores condiciones la rapidez del circuito. Además es importante contar con un motor potente.
El circuito de requiere una alta carga aerodinámica. El máximo rendimiento se consigue con un buen equilibrio entre la parte delantera (ha de ser dura) y la trasera (tiene que ser más blanda), dado que se necesita buen apoyo en la parte delantera para afrontar las curvas rápidas del circuito, y un buen agarre en la parte trasera para negociar las curvas lentas de la última parte del trazado.
Los neumáticos sufren mucho debido a las curvas muy rápidas que hay aquí. Como ya comentamos, los frenos no sufren mucho porque en la primera parte del trazado apenas se utilizan.
El coche tiene que tener mucha altura para que el piloto vea bien en las zonas de baches. En cuanto a las paradas, las altas posibilidades de lluvia hacen que las estrategias puedan cambiar.
Para esta cita y como ya ocurrió hace una semana en Austria tendremos 3 zonas de DRS en lugar de las dos habituales. El punto de detección de la primera zona estará antes de la curva 3, la Village, y el punto de activación después de Aintree para utilizarlo en la recta Wellington. La segunda zona de detección estará después de la Maggots, mientras que su correspondiente activación es, el tras el viraje de Chapel.
Pero además, este 2018, habrá una zona extra desde la última curva hasta la primera. Se activara tras la Curva 18, Club, de tal manera que podrían entrar a la primera curva, Abbey, y a la segunda, Farm, con él DRS abierto.
Para la cita de Gran Bretaña, Pirelli pondrá a disposición de los equipos los compuestos, Blandos, Medios, y el estreno este 2018, del compuesto duro. Además hay que recordar, que Pirelli para esta cita, así como para ya fue Barcelona y Paul Ricard, ha modificado sus compuestos. Concretamente en fabricar las gomas unos 0,4 mm más delgados de grosor, lo que permitirá que el peso de los monoplazas baje alrededor de un kilogramo.
Como anécdota, señalar que el circuito de Silverstone se encuentra en el Motorsport Valley, zona en la que se ubican las sedes de la mayoría de equipos de F1.
Horarios de este fin de semana
Viernes
  Libres 1: 11:00h
  Libres 2: 15:00h
Sábado
  Libres 3: 12:00h
  Calificación: 15:00
 Domingo
  Carrera: 15:10h