Hoy
29 de diciembre, se cumplen dos años del accidente de esquí del heptacampeón.
Desde entonces, el piloto alemán lucha día a día por su máxima recuperación.
La incertidumbre sobre la recuperación de
Michael Schumacher, el secretismo en torno a su estado y el apoyo de los
incondicionales marcan el segundo aniversario del grave accidente que sufrió el
"hombre récord" de la Fórmula Uno.
El siete veces campeón del mundo de
Fórmula Uno, que cumplirá 47 años el 3 de enero, permanece en su casa de Gland
(Suiza), donde fue trasladado en
septiembre tras despertar del coma al que fue inducido en el hospital de
Grenoble (Francia) y pasar un tiempo en una clínica de rehabilitación de
Lausana (Suiza), donde es atendido por un equipo de médicos las 24 horas del
día.
Aquel fatídico 29 de diciembre, todos los
seguidores de Michael Schumacher y de la F1 en general, nos quedamos en estado
de shock tras la noticia del trágico accidente que sufrió en las pistas de
esquí de Meribel.
Más allá de especulaciones, apenas han
trascendido a la opinión pública detalles sobre su evolución, en su mayor parte
apuntes inconcretos, demasiadas veces rodeados de rumores sin fundamento.
Desde aquel fatídico día, la información
sobre el estado de salud del alemán del piloto se ha limitado a escuetos
comunicados o puntuales declaraciones de su agente, Sabine Kehm.
En los últimos días, mucho se ha hablado
sobre esta falta de información, que da ligar a que surjan rumores y
especulaciones. Incluso hemos conocido que se ha llegado a prohibir la visita
de personas muy allegadas, como por ejemplo las visitas de su antiguo mánager y
amigo Willi Weber.
"Desafortunadamente, así es, igual
que lo escribí en Facebook. Corinna evita que tenga cualquier contacto con
Michael. He intentado docenas de veces conseguir visitarle, sin éxito.",
asegura Weber para el periódico Bild
Sobre todo esto, el abogado de
Schumacher, Felix Damm ha declarado:
"Su accidente fue algo que forma
parte de la historia contemporánea y podría ampliarse la información. Pero no
existe ese requisito una vez que comienza la recuperación y al público se le
excluye del espacio, pasó en un hospital y ahora en su casa. Hay que respetar
el derecho a la intimidad", concluye Damm para la agencia de prensa alemana
DPA.
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